Fue a conciencia pura que perdí tu amor… ¡Nada más que por salvarte! Hoy me odias y yo feliz, me arrincono pa’ llorarte… El recuerdo que tendrás de mí será horroroso, me verás siempre golpeándote como un malvao… ¡Y si supieras, bien, qué generoso fue que pagase así tu buen amor..!
¡Sol de mi vida!… fui un fracasao y en mi caída busqué dejarte a un lao, porque te quise tanto…¡tanto! que al rodar, para salvarte solo supe hacerme odiar. Hoy, después de un año atroz, te vi pasar: ¡me mordí pa’ no llamarte!… Ibas linda como un sol… ¡Se paraban pa’ mirarte! Yo no sé si el que tiene así se lo merece, sólo sé que la miseria cruel que te ofrecí, me justifica al verte hecha una reina que vivirás mejor lejos de mí..!